La voz es esa energía única y personal que transferimos a nuestras creaciones, aquella que inspira nuestras relaciones.
La voz es esa energía única y personal que transferimos a nuestras creaciones, aquella que inspira nuestras relaciones.
Va más allá de una manera de hablar, de ver o vivir la vida, eso… puede cambiar con el crecimiento y las circunstancias. La voz nace y crece bajo la superficie y se identifica con aquello que te produce una sonrisa pacífica en la que intervienen todos tus músculos faciales. Tiene que ver con un sentir profundo, con cuáles son tus principios vitales, aquellos de los que emanan tus valores más fundamentales.
La voz parte de reconocernos libres, de habitarnos siendo bondadosos con nuestra verdad, permitiéndola emerger.
Y solo en la aceptación de lo que somos aparece: íntegra, sin excusas, vital, protagonista de su existencia, sin juicio, con reflexión. Sabiendo que sombra y luz forman parte de esta existencia, que es tan útil la noche como el día.
La voz es dinámica, y para que se sostenga es imprescindible practicar y confiar.
Cuando digo que es dinámica, me refiero a que está viva y es acción. Se manifiesta en múltiples dimensiones. Como sonido, emitida desde nuestro aparato fonador, registra emociones e intenciones que matizan y colorean su expresión, que, prestando atención, nos permiten identificar lo que está ocurriendo en nuestro ser a partir de nuestras experiencias en el mundo y responder desde la consciencia. De ahí aprender a sostenerla, a partir de la práctica flexible pero continua de la respuesta a partir de una escucha plena, tanto interna, como externa.
Una voz auténtica se mueve libre de condicionamientos e influencias, no calla en su misión pues ha conectado profundamente con los principios raíz de su razón de vivir.
Los factores culturales y de creencias quedan relegados ante el sentido común, la sensibilidad, la percepción y la consciencia; ante la presencia del silencio en el aliento y la información que éste provee al cuerpo.
¿Te resuena?, ¿tiene sentido para ti?
La voz parte del alma y alinea mente, cuerpo y corazón, y es frecuencia y vibración, y cuando le sumamos la intención, tiene la poderosa capacidad de transformar.
Deberías incluir en tu página web enlace a tu canal de Telegram. Allí se puede encontrar el despliegue de tu formidable voz, haciendo y seduciendo por si misma la labor que intentas transmitir con la escritura desde esta página tan gráfica.
Más oh!! la escritura. Tratándose de LA VOZ, el verbo gráfico no puede siquiera aproximarse al poderío del verbo puro. Aunque esta página web resulta enternecedora y una apreciable muestra de la sensibilidad de su autora, recomiendo visitar el canal que la misma ha dispuesto en TELEGRAM. Allí, la actual tecnología permite incorporar archivos sonoros con una facilidad y capacidad pasmosas. El enlace es t.me/marabogar. ¡¡A disfrutarlo!!
Tu voz es un arrullo. Un manto cálido que arropa y abraza el alma. Faro para espíritus perdidos agotados por vagar en la cerrada noche de la desesperación o navegar un abismo de soledad. Desconozco cómo la vida te ha llevado a esta labor reparadora, pero es fácil identificar las fibras de amor que se entrelazan en el textil que te da forma y vibran al son de cada una una de tus exhalaciones. Trazas de predestinación parecen intuirse entonces y a poco que se te trata, resulta obvio y manifiesto. Nunca he participado en tus actividades profesionales pero he tenido la suerte de ser regalado con tu presencia y cercanía en varias ocasiones. Eres un ser de luz, de…
Habla y sigue hablando, para que los demás podamos escucharte, quedar extasiados por la armoniosa sonoridad que entona el timbre de tu voz. Ese bálsamo onírico con que acaricias el alma y adormeces el corazón, una sonata de amor en clave sonora que pocas persianas, persianos u otra gente no de Persia resultan capaces de interpretar. Y de regalar de la forma tan generosa como tu lo haces. Que la vida os colme de bendiciones!!!
Versos y abrazos
Reivindico un canal TELEGRAM sobre tus cosas en el que PODAMOS (cosas de jardinería) disfrutar sin trabas de esa preciosa melodía que tienes por voz.